El alma detrás de amor y ladridos

¡Hola! Gracias por estar aquí.

Mi nombre es Andrea Murillo Henao y hoy vengo a contarte mi historia.

Astrológicamente, mi signo zodiacal, mi luna y mi sol están en cáncer, esto significa que soy una persona altamente sensible y empática… En mi niñez y adolescencia crecí sin entender ni practicar la inteligencia emocional, hasta que yo misma descubrí que mi sensibilidad era excesiva y debía aprender a canalizarla de una mejor manera, esto me llevo a conectarme con el arte en toda su expresión: dibujos, bailes, cantos, escrituras y todo aquello donde pudiera crear y conectarme con mi energía femenina. 

Si me quieres conocer numerológicamente, tengo una vibración 6 en mi nombre y 4 en mi misión de vida. Esto significa que soy una persona familiar y organizada. A lo largo de mi vida se me han planteado situaciones que me dan la oportunidad de ser organizada, antes era caótico no tener el orden para mí pero ahora, solo fluyo y le agradezco a la vida cuando me da la oportunidad de aprender y crecer en pequeñas acciones cotidianas.

Creo en la magia. Creo que las personas tenemos muchas oportunidades para brillar. Creo en lo bonito, en lo especial. Me emociona ver el cielo, comer un helado, ver una persona sonriendo genuinamente, ver actos de bondad, estar con mi familia y ayudar a otros desde mi corazón.

Desde niña era un poco diferente. Veía a los que yo llamaba seres de estrellas y cuando le hablaba de ellos a mi familia, solo decían que tenía una gran imaginación. Ahora entiendo que lo que veía eran ángeles, no los veía como los suelen dibujar con sus alas enormes, sino como grandes seres brillantes y muy blancos.

Mi mayor sueño era comunicarme con animales, todo gracias a un programa muy famoso en mi época que se llamaba Los Thornberrys (haz clic aquí para ver el intro del programa) y cuando en mi camino de reconocimiento espiritual contacté con seres maravillosos como Lina, Mónica,Olga y Meli que me recordaron esta capacidad que tenemos de hablar con los animales. Desde ese momento no he parado de comunicarme con animales.

Conecté cada vez más con la luz y me encanta participar en los procesos de sanación de las personas. He pasado por muchas maestras que me han dado la oportunidad de recordar y ponerme en servicio de la luz.

Me encanta aprender y recordar sobre el tema espiritual y agradezco infinitamente a la vida por permitirme estar donde estoy ahora. Creo que somos los constructores de nuestra vida y debemos agradecer, aprender y entender nuestros procesos para poder crear lo que realmente queremos, merecemos y necesitamos para nuestro mayor y más elevado bien.